Con tan solo 10 años de edad Adhara Maite Pérez Sánchez, es una niña genio que cuenta con un coeficiente intelectual de 162, más alto que el de Einstein y Hawking y pronto podría ser la primera niña mexicana que pise Marte.
La historia de una niña mexicana
Adhara, es una niña de nacionalidad mexicana, estudió ingeniería, cursó ondas gravitacionales y astronomía observacional en el Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México, ha sido seleccionada para realizar un curso de patrones matemáticos y programación de la Universidad de Massachusetts en la Ciudad de México.
El gran sueño de está pequeña es ser científica y a tal grado de convertirse en astronauta para trabajar en la NASA, lo cual se está haciendo realidad. El objetivo de esta niña genio, es viajar al espacio y colonizar Marte.
El sueño de ser astronauta
Aunque los compañeros de Adhara la catalogaban como una niña «rara», sus maestros afirmaban que era una niña que se aburría muy rápido en clases, por lo que sus padres la mandaron con algunos especialistas, los cuales detectaron que la niña contaba con un hemisferio más desarrollado que el otro y después de muchos estudios le diagnosticaron autismo con un coeficiente intelectual muy alto.
La pequeña Adhara terminó la primaria con tan solo cinco años, la secundaria a los seis y medio y el bachillerato poco después. Pero fue en 2019 cuando la revista Forbes la colocó como una de las mujeres más poderosas de México.
Pensando en el futuro
Algunas Universidades de Arizona ya conocen a Adhara, al igual que la Universidad Rice, la cual ya la ha invitado a estudiar astrofísica. Sin embargo, su madre sabe que no será fácil en términos económicos, pero espera lograrlo y ayudar a su hija a convertirse en científica o astronauta.
La pequeña genio, fue aceptada para asistir al Programa Internacional Aéreo y Espacial (IASP), evento que se realizará en Alabama, donde tendría la oportunidad de aprender con expertos aeroespaciales y presentar un proyecto.
Cuando el rector de la Universidad de Arizona (UA), Robert Robbins, leyó su historia en Internet, de inmediato le envió una carta que fue publicada en The Arizona Republic, invitándola a asistir a sus cursos:
“Tenemos muchos programas sobresalientes de ciencia espacial, tendrías muchas oportunidades de trabajar codo con codo con los principales expertos del mundo”, le escribió Robbins y se ofreció a conectarla con la facultad del departamento de astronomía o con el laboratorio de ciencia lunar y planetaria.
Actualmente la familia de Adhara está buscando la manera de que ella obtenga una beca y así pueda cumplir todos sus sueños.
