Fuente: @topntp26.
Las visitas para abastecer nuestra despensa en los supermercados, mercados o tiendas de conveniencia; nos han mostrado un problema más que evidente, los alimentos se están encareciendo.
Más esta carencia no es particular de nuestro país, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO); ha liberado una publicación en su portal, en el que registró un aumento del 28% en el precio de los alimentos a nivel internacional, al cierre del 2021.
La causa, como podríamos bien suponer, se debe a la aparición de la variante Omicrón, que ha afectado directamente a la producción, distribución y demanda de productos alimenticios; disminuyendo los dos primeros y elevando el último.
Un año de incrementos
La materia prima que mostró un aumento significativo; fue el maíz, con una subida del 44%; y el trigo, que se elevó hasta un 31%; en comparación con los precios del 2020.
Este efecto negativo, también se pudo apreciar en la producción de azúcar, de carnes, lácteos y derivados como aceites vegetales, estos últimos con un incremento del 65.8%, uno de los más elevados para cualquier producto.
En comparación con años pasados, el alza se muestra similar al 2011, un año en que la inflación golpeaba con fuerza a la economía familiar en todo el mundo.
Señales de esperanza
En diciembre del 2021, los precios mundiales de los alimentos parecieron mejorar por un pequeño porcentaje de 0.9%, pero no parecen vaticinar un buen inicio de año.
En opinión de los expertos; esperemos que la sociedad mundial pueda hacer frente pronto a esta variante, pues de lo contrario seguiremos viviendo una temporada de aumentos.
