¿Sabías que la Pitaya es una cactácea que realmente se llama Pitahaya?
Hace unos días visité un rancho sembrado de 10 hectáreas de pitahaya. Es un rancho propiedad de mi amigo Manuel Cárcamo, a quien conocí cuando estudié la especialidad en planeación y evaluación. Hoy Manuel es un agricultor próspero. De su historia puedo escribirte los siguientes conceptos.
En los diversos proyectos que he conocido y algunos emprendido me encuentro que la disciplina es una constante necesaria para doblegar cualquier actitud negativa. La disciplina llevó a Manuel Cárcamo a aprender y entender el cultivo que sus frutos deben recolectarse en menos de tres días porque son muy delicados.
La determinación es otra característica de un triunfador, es decir mantener una fijación en el propósito, para que a pesar de los obstáculos o privilegios que se encuentran en el proceso, el horizonte se mantenga como una estrella polar que dirige al timonel. Cuando Manuel inició el cultivo no había esquejes o plántulas para sembrar, sin embargo viajó a Campeche y Oaxaca para conseguir sus primeros vástagos. No desistió.
Una tercera característica es el Dinamismo. Lleva más de 10 años jubilado y a pesar de ello tiene la alegría y ha desarrollado la capacidad para interactuar en situaciones, contextos y con personas que no imaginaba en la planeación del proyecto. Lo mismo trabaja asesorando a otros agricultores en el cultivo, que se reúne con integrantes del Centro Empresarial Chiapas para promover sus logros. El Dinamismo es actuación proactiva. Siempre adelante.
Con estos tres motores internos este emprendedor jubilado vuela y seguirá volando. ¿Tú cuándo iniciarás el despegue de tu idea o proyecto?